Hinds fin de gira estelar en casa

Después de seis meses sin pisar el panot de flor de las calles de Barcelona y tras un largo año de gira entre los dos hemisferios del planeta, saltando entre meridiano y meridiano, las Hinds vuelven a territorio local para cerrar una etapa. Y qué mejor sitio para hacerlo que en sus orígenes, en territorio casa, en el lugar que les pertenece.

Pero no estamos hablando de Madrid en esta ocasión, hablamos de Barcelona, concretamente de la Sala 1 de Razzmatazz, donde el grupo fue acogido dentro del marco de conciertos programados por Razzclub, que se han llevado a cabo a lo largo de estos últimos meses, en las noches barcelonesas entre sábado y domingo.

Aún no era la 1:00h de la madrugada cuando la sala ya estaba abarrotada de gente que bailaba al ritmo de acorde indie, con la mente levitando en otra órbita y la mirada fija en el escenario. Quizá pasaban dos minutos de la hora, poco importa, cuando el telón de la sala se abrió y aparecieron las Hinds, enérgicas, hipnóticas, entre globos y flores llenas de cromatismo musical.

Tras su habitual introducción, emprendieron nota tras nota a través del setlist tocado a lo largo de la larga gira, mezclando canciones del disco Leave Me Alone (2016) como ‘Garden’, ‘Chilli Town’, ‘Bamboo’, ‘San Diego’ o ‘Easy’, en perfecta simbiosis con temas de su álbum más reciente I Don’t Run (2018) como ‘Soberland’, ‘The Club’ o ‘Linda’. Por otro lado no pudieron dejar a sus fans huérfanos de directo de su último single ‘British Mind’, tocado por primera vez en la ciudad condal, tras su lanzamiento en el mes de octubre.

Pero esto no fue todo. La suma del fin de gira con el hecho de tocar en casa, trajo tras de si una euforia descontrolada y contagiosamente contagiosa. Tal fue la confianza que el grupo tenía con el público, que sorprendieron a aquellos fans de La Resistencia y de su colega Broncano, con largos segundos de la canción ‘El Ritmo de la Noche’. Momentos después, Ade Martín (bajo), Ana Perrote (Voz y guitarra) y Carlotta Cosials (Voz y guitarra) marcaron formación y enfundaron sus instrumentos para dar paso a ‘Castigadas en el Granero’. La formación del trío de la barbaridad positiva.

La energía fluía cuando Carlotta mandó callar a Razzmatazz y explicó que la canción ‘Tester’ mostraba el punto de vista y la voz femenina de todas aquellas canciones de desamor escritas por grupos formados por integrantes masculinos. Era hora de mostrar la otra verdad de un mismo tema. Aquello ya no podía parar. Todo iba a más. Pero sin duda los tres grandes momentos de la noche llegaron cuando Carlotta preguntó a quién le gustaban The Clash y tocaron la cover ‘Spanish Bombs’, cambiando parte de la letra por Spanish bombs rock in Barcelona, tras un abismal silencio de esos que te explotan en el interior.

La locura ascendió a la cima cuando en ‘Davey Crockett’ invitaron a cantar a la Mari, amiga de las chicas de la banda, junto con su compañera de Operación Triunfo Marta Sango, que desató la energía de Ana Perrote, abandonando por completo la guitarra cuando llegó el momento de ‘Rookie’, tirándose al público y cantando sobre las vallas que lo separan del escenario, volando de izquierda a derecha.

Este acto se contagió al resto del grupo, cuando llegado el fin de concierto y de la gira a través de ‘Finally Floating’, Amber Grimbergen (batería), aún con la adrenalina acumulada en el cuerpo tras machacar con fuerza el bombo y la caja, saltó de la batería al público, cerrando tras de si una larga y deslumbrante gira, centelleando en un territorio en el que al fin están siendo valoradas como desde hace tiempo se merecen.

 

Texto y fotos: Marta Mouns